Uno de los países que más hemos podido recorrer viajando es Turquía, que tiene un montón de sitios que debes visitar si o si. Aquí les compartimos un ranking de los lugares que nos encantaron y que recomendamos no perderse por nada del mundo.
- Capadocia
- Estambul
- Efesos
- Pamukale
En este post les hablaremos de nuestro #2 Estambul
#2 Estambul
Sin duda uno de los lugares alucinantes de Turquía y probablemente uno de los destinos infaltables de los viajeros en este país.
Estambul es el punto de encuentro en Oriente y Occidente, marcado por su historia de conquistas. Aun Constantinopla para algunas personas, con un indudable carácter multicultural que se deja notar de inmediato.
La primera vez que llegamos a Estambul fue en pleno invierno e íbamos de paso hacia el sur (a Cesme), escapando del frío. Nos quedamos 4 días y llovió, llovió, llovió. Esto no nos impidió salir, aunque si limitó el estilo de viaje que hacemos, que es caminar para conocer. Nos hubiera gustado poder recorrer más pero así es la vida-viaje-lowcost. De todos modos conocimos sitios interesantes y curiosos que te contamos en este post 🙂
En cada esquina, una mezquita
Cuando estás en Estambul te das cuenta de que estás en otro lugar del mundo y con una cultura diferente.
Habíamos tenido la oportunidad de ver mezquitas en Albania. Cuando vivimos en Ksamil había un par y escuchábamos los rezos del día. Pero aquí la situación está a otro nivel, es brutal. Con más de 3000 mezquitas, los rezos resuenan en un eco por toda la ciudad, que es gigante, y pareciera que estás en otro tiempo y otra historia. Algo totalmente ajeno a lo que has vivido pero que aquí es completamente normal. Es realmente alucinante.
También te das cuenta de lo increíblemente diferente que es la «arquitectura religiosa» y lo imponente que llegan a ser algunas de sus construcciones que son parte del paisaje.
Las mezquitas que nos parecieron ser las principales atracciones turísticas son la Mezquita Azul, a la cual no pudimos entrar.
Y la Hagia Sofia
La Hagia Sofía fue antiguamente fue una iglesia ortodoxa y cuando los turcos conquistaron Constantinopla la convirtieron en mezquita.
Antes de entrar te informan sobre la vestimenta adecuada para ingresar a la mezquita
También te tienes que quitar tus zapatos y dejarlos afuera
Nos pareció impresionante su inmensidad
Y había una barra que separaba a los turistas de los fieles
Nosotras nos quedamos durante el rezo, sentadas con el resto de los visitantes
También pudimos entrar en pleno rezo a otra mezquita, mucho más pequeña. Una de las tantas que encuentras caminando. Nosotras nos sentamos atrás de la cinta.
Y algo muy impactante fue ver el sector separado donde rezan las mujeres
Barrios comerciales
La verdad es que no es nuestra onda el viajar y andar de compras. Como andamos ligero no tenemos espacio para acumular cosas y solo cargamos lo necesario. Pero desde que llegamos a Estambul comenzó a llover y no lo teníamos previsto. Así que para poder conocer la ciudad caminando, salimos del hostal en búsqueda de zapatos para la lluvia que el zorro necesitaba y casualmente terminamos en el Gran Bazar.
El Gran Bazar
El Gran Bazar de Estambul es uno de los mercados más antiguos y grandes del mundo. Tiene una onda laberíntica, con infinitas tiendas de ropa, zapatos y chucherias varias.
Tiene también un sector de joyería que para ingresar tienes que pasar por un detector de metales o.O (a lo cual no le sacamos foto xd)
Sobre el Gran Bazar no tenemos tan buenos recuerdos. Cuando encontramos una tienda de zapatos tuvimos la experiencia de comprar en Turquía y ser víctimas de un regateo del cual no queríamos participar :`(
El tipo que vendía se esmeró en que el zorro se pusiera los zapatos y no nos quiso decir el precio hasta cuando los tuviera puestos. Era impresionante su poder de presión. Al final dio un monto absurdo, que fue bajando de apoco en la medida que veía nuestras caras de indecisión e incomodidad. Terminamos pagando el doble de lo que costaban unas imitaciones de marca, pero ya a esa altura no queríamos seguir buscando, además con la lluvia, así que aceptamos y decidimos nunca más ponernos un zapato en Turquía sin antes conocer su precio jiji
Avenida Istiklal
También el frío en la ciudad fue brutal y tuvimos que conseguir algo de ropa para que la Javi no muriera congelada.
Así fue como dimos con la avenida Istiklal, motivadas por visitar el Decathlon que se ubica en este sector comercial jeje
La avenida Istiklal, es una famosa calle de 3 km., que nos sorprendió por estar repleta de comercio y de gente.
Aquí está lleno de cafés, pubs, pastelerías históricas, chocolaterías y restaurantes.
También boutiques chulas, tiendas de música, librerías, galerías de arte, cines y teatros.
Esta avenida conecta la plaza de Taksim con la Torre de Gálata, dos sitos relevantes que visitar.
Los turcos son buenos para vender
Desde que bajamos del avión nos empezaron a vender con insistencia taxis hacia el centro.
Ya en la ciudad, cada vez que mirábamos un restaurante, los meseros apostados afuera de los locales se acercaban para ofrecer su comida. Nos hablaban en diferentes idiomas para enganchar, incluyendo español. «Entra, la comida es muy buena, si no te gusta no pagas», nos decían. Al principio nos reíamos porque era curioso y decíamos «no, muchas gracias», con amabilidad. Pero ya luego de un rato se volvió desagradable, porque les decíamos que no y aún así persistían con más ganas!!!
Así que para eludir a los vendedores optamos por evitar al máximo el contacto visual con estos y esquivarlos caminando rápido si se acercaban a ofrecernos algo jeje
Esto es algo que definitivamente no nos gustó para nada de la ciudad. No puedes simplemente mirar y curiosear las tiendas, pues están los sujetos-vendedores molestándote, que no aceptan que tu les digas «no, gracias, solo estoy mirando».
Nieve inesperada
Después de esos 4 días lluviosos nos fuimos de Estambul hacia nuestro alojamiento de Cesme, donde vivimos 3 meses.
Y luego solo volvimos para hacer un trasbordo de bus, hacia nuestro próximo destino. La idea era solo parar unas horas en el terminal Esenler para seguir nuestro camino hacia Ravda en Bulgaria, pero nevó como nunca en la ciudad y cancelaron la salida de todos los buses, hasta el otro día 🙁
El personal de la compañía de buses no mucho hablaba inglés así que la comunicación fue difícil, pero entendimos que teníamos que encontrar alojamiento para pasar la noche y así poder tomar el bus al día siguiente.
Cerca del terminal de buses habían hoteles pero estaban todos llenos! No teníamos internet, hacía mucho frío, nosotras estábamos con gripe y super cansadas porque veníamos de un viaje largo, solo queríamos llegar a la nueva casita :'(
Por fortuna un chico de la india estaba en las mismas que nosotras y nos apañamos en la búsqueda de alojamiento. Los taxis no estaban haciendo recorridos, así que tuvimos que tomar el transporte público (metro y luego un tranvía). No tardamos más de una hora en llegar al hostel en el centro de Estambul y pudimos ver la ciudad hermosa nevada. Fue una experiencia hermosa y horrible a la vez xd
Un mensaje inspirador
Con Estambul hemos tenido una relación complicada, es la verdad. No pudimos visitar todos los lugares que queríamos cuando nos quedamos por primera vez por el tema de la lluvia y quedamos con ganas de más. La segunda vez que pasamos por la ciudad, la nieve fue tan brutal que nos canceló nuestros planes en un mal momento de salud 🙁
Luego volvimos a pasar una tercera vez para tomar un bus hacia nuestro alojamiento en Anamur (la segunda vez que vivimos en Turquía) y paramos en el centro solo para comer y no alojamos.
Aquí estamos bacilando en el restaurante donde el mesero-captador nos convenció a entrar jeje
Sopita de lentejas con limón, un clásico en Turquía. Además, pancito recién horneado y un chimichurri pincante que no sabemos cómo se llama.
Ensalada de queso, con balsámico de granada. Una delicia.
En este tiempo el tema del covid ya había pasado y se sumó la guerra Rusia-Ucrania que elevó los precios descomunalmente para nuestro presupuesto. Si en 2021 alojamos por 50 euros 4 noches en una habitación con baño privado y cocina. Luego en 2023, el mismo alojamiento costaba 50 euros la noche O.O Algo que ya no podíamos pagar con tanta soltura jeje
Y lo que más nos quedó pendiente para volver a Estambul es para conocer los millones de gatos que viven aquí y que hacen de este destino un sitio privilegiado para las personas amantes de los gatitos. A nosotras como nos llovió tanto no pudimos verlos.
Nos encontramos con un gato en 2021 cuando caminábamos por la avenida Istiklal
Y en 2023 vimos a unos cuantos en el centro, en el ratito que pasamos por allí 😀
Esa fue nuestra historia con esta ciudad.
Si algún día la visitas, recuerda que los turcos en Estambul son insistentes para vender.
Un abrazo!
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